Cuando
eres pequeño no crees que ciertas cosas puedan ser mentira y cuando creces no
crees que ciertas cosas puedan ser verdad.
A
medida que creces tomas consciencia de la realidad que te ha tocado vivir: te
das cuenta de lo perro que es este mundo de hoy en día y de aquello que
realmente tiene verdadero valor para ti. Crecer es básicamente aprender en
todos los sentidos.
Y
sí, este mundo es perro, porque sin ir más lejos en los últimos telediarios
podemos ver como palestinos e israelíes se enfrentan en una guerra que perdura
en el tiempo, entre hermanos, en el que el único fin visible es la siembra de
odio y la venganza para exterminar a los iguales.
Este
mundo es perro, porque noticias así son habituales por nuestra culpa, por querer
creerlas habituales, porque cada vez somos de forma progresiva e irrefrenable,
un poco menos humanos
Este mundo es el gran negocio de unos pocos.
Este mundo es el gran negocio de unos pocos.
Aquí
en La Tierra vivimos gobernados bajo la inamovible idiosincrasia de nuestra
especie mientras esperamos veredicto externo y ajeno sobre si existe vida
inteligente… ¿pero qué pensarían si vieran nuestros telediarios?